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Presentación libro de Álida Allocco Permiso
para volar 19/04/15
o Oriunda de Pozo del Molle
o
Graduada en
Lengua y Literatura
o Se desempeñó
como docente y luego Vicedirectora del nivel medio del D.V.S.
o
Sus dos
pasiones: la literatura y el teatro.
§
Teatro: fue
coordinadora de encuentros infanto juveniles, directora de elencos y actriz de
la Comedia Municipal.
§
Literatura:
comienza a escribir poesía a fines del 2004 y se hace merecedora de numerosas
distinciones, como el 1° premio de CEN ediciones y el 1° premio de SADE Córdoba
durante el 2013.
§
Pertenece a la
filial varíllense de SADE (Sociedad Argentina de Escritores).
§
Organiza el
Certamen Nacional de Poesía y Encuentro de Escritores “Sendero de Palabras”,
concurrido encuentro anual de poetas y narradores de todo el país.
§
Su primer libro
de poesía fue Vuelo de bautismo.
o Hoy presenta su
nuevo libro Permiso para volar, cuya
edición constituye el 1º premio del Certamen Internacional de CEN Ediciones,
año 2013.
Dijo Eduardo Galeano que "las palabras pueden tener dedos que
tocan a quien las lee..."
Difícil tarea me encomendó la Directora de Cultura , Lic. Elisa Larghi,
precisamente por ser prima de Álida y por conocer muchísimo más a la persona
que a la escritora. Con Álida compartimos vendavales familiares, alegrías inmensas,
profundas penas, grandes pérdidas. Somos muy distintas, pero tenemos una pasión
que nos une: la literatura. Y es hoy nuevamente la palabra la que propicia este
encuentro: se titula Permiso para volar,
y es su segundo libro.
No lo he leído, de modo que desconozco su
contenido. Presentación atípica de un libro, me dirán ustedes, y si…no seré yo
quien les hable del texto sino su autora. Después cada lector hará su recorrido
y sacará sus propias conclusiones. Y observará el qué y el cómo se expresa
Álida en sus poemas.
Pero hay una palabra que une sus dos libros,
y es la palabra “vuelo” en el primero (Vuelo
de bautismo en el título y en sus tres vuelos, como se divide el libro) y
“volar”, en el segundo (Permiso para
volar). El vuelo permite el despegue, la distancia de lo terrestre o la
evasión según los casos. Es vuelo de pájaro, de hojas, de ausencias, de
búsqueda de los sueños, de búsqueda de la palabra. De la niña que comenzó a volar recostada en la
rama de un paraíso y desplegaba sus alas con un libro en la mano (“Infancia”),
de la luciérnaga que tenía ganas de volar en primavera (“Ganas de volar”), de
la tristeza que levanta vuelo (“Geografías), de las hojas de otoño en su último
vuelo hacia la tierra (“Hojas de otoño”), del vuelo interminable de cenizas al
viento (“Ausencia”), del vuelo atávico de la calandria y el grateus; de la
liturgia de la calandria en el vuelo inicial de la mañana (“Como el de ayer”);
en la confesión del pájaro que aún pretende volar (“Confesión de pájaro”); del
ascender hasta la cumbre para alcanzar la palabra (“Avidez de manzana”); de la
gravedad que no va a impedir el vuelo, “porque en el vuelo concertaré una
alianza con el viento/para alcanzar sin trabas/ la ligereza de los sueños”
(“Comienzo”). Pienso: de todos los múltiples sentidos de la palabra “vuelo” al “permiso” para volar
¿cuál será la diferencia? ¿por qué la autora pide ahora “permiso” para volar? ¿Permiso como
licencia, autorización, consentimiento para decir algo? ¿qué alcance tiene esa
palabra en este nuevo libro? No lo sabemos…escuchémosla que algo nos guiará en
ese descubrimiento. Leamos sus poemas para descubrirlo.